Mes: marzo 2016

Cien años de perdón

Cien años de perdón

Todo pintaba bien. La nueva superproducción de Telecinco Cinema quería ser la nueva El Desconocido, un largo de acción y suspense capaz de encajar al espectador en la butaca. El tráiler prometía un buen argumento, con acción y toques de tensión y un estupendo reparto, todo ello escrito por uno de los mejores guionistas del país. Con la promoción, a lo grande, parecía que lo que se iba a estrenar sería un nuevo taquillazo de los que gustan a todos, pero la realidad es otra, y Cien años de perdón no consigue, ni por asomo, lo que pretendía.

Cien años de perdón es un thriller (que tiene poco de thriller) que cuenta el asalto de un grupo de atracadores a la sede central de un banco. Hasta aquí, podría haber sido una película entretenida, sin más. El problema llega cuando se añade una subtrama (o quizás trama principal, según como se quiera ver) basada en la corrupción política. Pasando por encima de todo, sin profundizar demasiado en nada, la película pretende durante su recorrido que cada espectador complete su propio refrán: quien roba a un ladrón… ¿Tiene cien años de perdón? La película quiere hacer una crítica basada en el «quién roba a quién», pero quizás esto llega demasiado tarde. En este país ya se han planteado hace tiempo otras cuestiones.

Al reparto no se le puede poner pegas. Ni siquiera se puede criticar el guión, ya que con varios toques de humor hace más amena la película, pero los personajes son todos demasiado vacíos y sabes desde el primer momento cómo es cada uno. La trama no deja lugar a sorpresas y la acción no acaba de desarrollarse de una forma atractiva como para que el espectador se meta por completo dentro de la historia. Se podría decir que es una película entretenida, cuya trama comienza muy rápido, pero habría que añadir que se hace algo larga, aún durando hora y media, y esto es debido a que la historia es demasiado insulsa. Cien años de perdón es una película muy prescindible y fácil de olvidar.

Calificación 2